Me pasó el otro día, el miércoles. Supongo que de la hiperactividad del día, no conciliaba bien el sueño, y entre vuelta y vuelta en la cama, comencé a oír unos profundos ronquidos seguidos de una tos impresionante. De casa no procedían, mi hijo dormía profundamente y mi compañera igual. Me levanto, me acerco hasta la puerta del piso y percato que los sonidos venían del otro lado de la puerta. Por un momento estuve a punto de abrirla. No lo hice. Pensé que si lo hacia , pudiera montarse algún tipo de escandalo que despertara y asustara a mi familia. Miraba por la mirilla ,no veía nada. La luz de las escaleras estaba apagada. Repasaba mentalmente quien pudiera ser esa persona. La del otro lado. Quien con una temperatura tan gélida como la de estos días, había optado por cama, el rellano de mi puerta. Pensé que pudiera ser algún vecino que hubiera tenido una bronca en casa... pero no era probable. A nadie le gusta que los vecinos se enteren de sus problemas. Pensé que pudiera ser algún borracho, durmiendo la mona, pero vivo en un cuarto piso sin ascensor, excesivo para alguien en condiciones etilicas. Las horas pasaban, y me resigne a esperar que sonara el despertador, y cuando tuviera que salir al trabajo revolvería esta inquietante situación.Abrí la puerta, y observe un bulto ,casi fantasmal, que en la penumbra se levantaba del suelo, lo cual me dio pie, para poder acceder al interruptor de la luz.Era un hombre mayor, me lo imagino cerca de los 70 años, difícil saberlo tras una barba canosa. Unos ojuelos lagrimosos, como cuando mi gata esta enferma. La mirada cabizbaja, y una voz ronca, disculpandose: "Estaba echando una cabezadita... ya me voy".Su sombra se desvanecía escaleras abajo. Fui incapaz de decir nada. Un nudo aprisiono mi voz en el pecho. Creo que era pena. Me pareció tan indefenso, tan vulnerable, tan injusto...Salí a la calle tras el, y vi su silueta encorvada doblar la esquina.Las seis de la mañana. Un montón de bombillas relucientes me iluminaban, mientras yo arrancaba la moto, y pude por fin decir algo, dos palabras que me salieron desde el estomago y que fueron perceptibles en toda la calle:Puta navidad.!!Me pasó el 20 de diciembre de este mismo año, el otro dia, en una comunidad , que se enorgullece de tener la mejor calidad de vida de todo el Estado.
Josu.
4 comentarios:
Vayap. un saludo.
MAikel
La Paz, 20 de diciembre del 2007
Querido Josu: Paz y Bien.
Normalmente la sorpresa no nos permite actuar correctamente y después de pensarlo y reflexionarlo podemos encontrar diversas formas adecuadas para hacerlo, pero a veces resulta tarde.
No es malo que pensemos que siempre podemos hacer algo por los demás, aunque sea una sociedad satisfecha, o una empobrecida, como donde vivo yo.
¡Quizás, invitándole a un café "al viejo" y charlando con él un rato, podría haber sido una "Feliz Navidad", en lugar de una "Puta Navidad".
Mis mejores deseos para toda la familia y las amistades de por ahí y un mejor año para todos, de tu hermano y amigo,
Carmelo
El otro día no es el otro día ... son todos los días cargados de escenas como la tuya, como si todo fuera un teatro pero todas estas cosas que no se ven solamente ocurriera entre bambolinas, dándo siempre una sonrisa al espectador y guardando la mierda detrás del telón.
Pero esa realidad está ahí, llamando y gritando ... o tosiendo.
Me ha jodido leer lo que has mandado, ya que yo me siento espectador de este teatro de mierda y no veo o no quiero ver lo que pasa detrás del telón.
PUTA NAVIDAD
joxe
Aupa carmelo!!
Cuanta razon tienes!!. Pasa que a mi las navidades me resultan unas fechas tan hipocritas, en este mundo en el que vivo, que de vez en cuando preciso restregarlo o restrgarmelo a mi mismo en la cara.
No obstante, todos mis respetos y solidaridad a las personas que la Navidad no la entienden como unas fechas de consumo y ostentacion, si no unas fechas de reflexion y hermanamiento humano. Como bien se, que es tu caso. Por algo estas tan lejos.
Un abrazo, de tu tambien hermano y amigo.
Josu
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