Mientras se afeitaba la cabeza, se dijo así mismo: -A partir de hoy voy a cambiar-.
Se duchó para desprenderse de todos los pelos, como si en ellos estuviera escondida la causa de todo su mal.
Salió de la ducha y se miró nuevamente el el espejo. La piel blanca de su cabeza pelada resplandecía como una bombilla. Por primera vez desde hacia mucho tiempo sonrió. Y al hacerlo, él se sintió guapo.
-Yo no estoy loco- le dijo al espejo- En definitiva los locos que creen que están locos, no lo están. Los locos de verdad, nunca dicen que están locos, ni sonríen como yo, ni se sienten guapos como yo me siento.-
Y volvió a sonreír.
Y en ese instante -creo que fue en ese instante- decidió que la mejor manera de superar el mal que le acosaba, era mostrándose ante el mundo, así, tal y como se sentia. Sin corazas de ningún tipo. Con el corazón en la mano. Sonriente. Y así salió a la calle. Así se echó al mundo.
Apenas había salido del portal de su casa, percibió que algo no funcionaba bien.
Las caras de estupor de sus vecinos. La madre tapándole los ojos a su hijo. Las "risitas" de dos colegialas, que se cubrian el pecho con los libros. La viejita amenazándole con un paraguas y por último los guardias, esposándole y metiéndole en un furgón policial.
Olvidó vestirse.
O igual no. Igual también fue algo que él decidió, mientras se afeitaba la cabeza. No lo sé.
6 comentarios:
josu
genial!
a´si me gustan los cuentos, también es lo que busco cuando escribo, ese remate final
y a la vez adentro sin buscarlo está ese espejo, que nos pone enfrente de nosotros mismos y por que no? sacarnos porfin las capas de cebolla y mostrarnos8de adentro que es lo más difícil, no?)
en el espejo en realidad encontrarmos ese "otro mi"
acotación aprehendida de winipoo, esa tierna reflexión dirigida a la infancia, pero que es la sensación de todoel que se enfrenta a un espejo
cariños a todos
Gracias Mabel...
Y también está, eso de que ... ¿Realmente nos mostramos como somos?. O en realidad tememos... que nos juzguen y detengan.
Los locos. Para el mundo los locos.
MUY BUENO AUNQUE UN POCO OBSESIVO LO DE LOS LOCOS
Anonimo:
Si... puede ser una obsesión. Pero el mundo creo que se divide en eso, los locos y el resto.
Cuando lo leí hace un mes, quizá, me sentí identificada. Hace tiempo que intento decidirme a afeitar mi cabeza y que surjan la canas, que me vean tal cual soy. No me animo...Será cosa de locos?...
Colombina: Para mi gusto, siempre es preferible ser tal como se és.
No obstante las canas no indican mucho, yo también las tengo, (jejeje, en la barba)y sigo siendo un "pibe".
Gracias por pasar.
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